martes, 7 de septiembre de 2010

DE AMORES PIADOSOS 07.09.2010, CHILE

Reduciré a escombros
y fragmentos,
las palabras que me dijiste
un día
tras la cámara oculta
de los sueños,
porque eras piadoso y poeta
entonces y la mar
era tu caverna marina y silenciosa.
...Me refugié en tí,
porque sabías
de mundos subterráneos,
de terciopelos y amapolas,
pero te enajenaste,
perdiste el camino,
erraste la causa,
se te colapsó el destino.
Espíritus ególatras
te aprisonaron las manos.
...ya no supe
de tus viajes estelares
por la India,
buscando la rosa moribunda
de mí vestido,
ní la estrella
que colgaste en mí pecho
en Barcelona.
¿Dónde quedó entonces
la cigarra dorada
que me regalaste
como trofeo
del Palacio de las Olas?
¿Donde quedó la cruz labrada
que anudaste a mi cuello
en las frágiles horas?
¿Donde reposo mi mano blanca
de nenúfares,
para saciar el ánfora de tu boca?
¿Dónde dejo tus frases segmentadas?
¿Dónde, la metáfora
de mis sombras?